Hacienda obligará a los parados a presentar la declaración de la Renta a partir del año que viene

La Agencia Tributaria ha establecido una nueva obligación para los beneficiarios de prestaciones por desempleo: a partir del próximo año, deberán presentar la declaración de la Renta, independientemente de sus ingresos. Esta medida, que forma parte de un Real Decreto-ley aprobado en mayo, entrará en vigor el 1 de noviembre y afectará a aquellos que hayan cobrado el paro durante el año.

¿Quiénes están obligados a presentar la Renta?

Tradicionalmente, los contribuyentes están exentos de presentar la declaración si sus ingresos son inferiores a 22.000 euros anuales. Sin embargo, con esta nueva normativa, los parados deberán declarar incluso si están por debajo de este umbral. Para aquellos con más de un pagador, el límite se reduce a 15.876 euros, siempre que la suma de lo percibido por el segundo pagador no supere los 1.500 euros anuales.

Esta iniciativa busca incrementar el control sobre los contribuyentes y se suma a una obligación similar ya establecida para los autónomos, quienes deben presentar su declaración independientemente de sus ganancias. Se estima que esta normativa impactará a alrededor de 200,000 trabajadores autónomos.

¿Cuándo se aplicará esta obligación?

La medida se aplicará a la declaración de la Renta de 2024, que se presentará en la primavera de 2025. Uno de los aspectos más preocupantes para los beneficiarios es que el incumplimiento de esta obligación conllevará la pérdida de la prestación por desempleo. El texto del Real Decreto-ley establece que la suspensión de la ayuda se activará si la entidad gestora detecta que el beneficiario no ha presentado su declaración del Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas.

¿Qué sanciones se aplicarán a aquellos que no presenten la renta?

Los parados que no realicen la declaración enfrentarán sanciones que varían dependiendo de si la declaración les resulta a pagar o a devolver. Si resulta a pagar, la multa podría ser de entre el 50% y el 150% de la deuda. Esta multa podría incrementarse si Hacienda determina que ha habido un perjuicio económico o si el incumplimiento se repite. En el caso de que la declaración resulte a devolver y no se presente, los contribuyentes también se arriesgan a multas, que podrían alcanzar los 200 euros. Esto podría llevar a situaciones en las que, si la devolución es menor que la multa, el contribuyente podría terminar debiendo dinero a la Agencia Tributaria.

Para más información, puede contactar con el departamento fiscal de CINC Asesoría.

Continuar leyendo

Ver todas
CINC